Charlas Tarugoconf
Hace unos años (en abril serán 5), hice click en un enlace que, de una forma muy sutil al principio, iba a cambiar para siempre mi forma de entender por qué estoy aquí y ahora:
Sí, soy Tarugo. No sabía yo cuánto. Lo he descubierto con los años, y con algunos maestros que me enseñaron que lo mejor de todo era el camino, y que hackearse a uno mismo es esencial para descubrir lo que te lastra en el día a día.
El año pasado tuve la inmensa suerte de poder aterrizar, entusiasmado, en medio de un grupo de gente que me iba a fascinar, y que me ayudó a entender que para avanzar, el mundo no necesita consumir; sino reciclar. Necesita compartir, incluir, aprender, mezclar, sumar, ayudar y ser ayudado. Sin complejos, sin ruido, sin deformaciones.
Además de David, Candela y su equipo, me llamó la atención un personaje con camisa de flores y mogollón de rotuladores, dotado con la portentosa capacidad de congelar en tiempo real cada charla sobre un lienzo. Ahí lo tenéis. Ahí. A la derecha. ¿Lo veis?.
Discreto, sin pausa, y sin querer llamar la atención, este personaje extraía la esencia de cada charla en ideas visuales, ensambladas armónicamente, a las que no les faltaba nada. Y les sobraba menos. Y encima parecía fácil…. Mientras que yo a duras penas me manejaba entre notas y tuits.
Así descubrí a Javier Alonso. Un tío especial, transparente, sencillo y valiente, que me habló de eso que hace con la naturalidad del genio. Y me dijo que se aprende. Y que “no es tan difícil”. Ozú que no…
Desde entonces le he visto desplegando su magia en varios eventos y, cómo no, me alegré cuando leí que formaba otra vez parte del Equipo que estaba trabajando en la Tarugo Reloaded.
Este año, además, he tenido una inmensa suerte: no sólo he vuelto a la Tarugoconf, sino que he podido constituir una banda junto con mis amigos José Turégano, y Miguel Ángel Nicolao, este último orgulloso representante de Panel Sistemas como patrocinador de la Pulpeirada en la Tarugo17.
En la verbena final pude hablar tranquilamente con Javier, y me confesó que pese a lo espectacular del proceso, a veces dudaba de si sus actas visuales servían para ordenar, clasificar y recordar las charlas. Quería saber si resultaban realmente útiles pasados unos días, cuando tu memoria caché ya se ha llenado con otras cosas.
Así que me he propuesto ayudarle con este experimento. Después de varios días, sin tocar ningún contenido de la #Tarugo17, he vuelto a abrir sus dibujos para repescar lo que escuché, viví y aprendí.
Aquí, un Prezi con mis apuntes sobre la charla de Eloi Gómez, pasados doce días desde que la escuché. Pincha para empezar:
Mi conclusión tras este experimento es que el trabajo de Javier me ha sido MUY ÚTIL. Los conceptos se quedan pegados al recuerdo con su impacto visual. Repasando mis notas, no se ha escapado casi nada de lo fundamental. Quizá algún dato. Puede que alguna frase. Es posible que alguna reflexión derivada de una pregunta…
Pero la esencia queda ahí, congelada en tiempo real.
Así que me reafirmo en agradecer y admirar su trabajo. Y os animo a que le conozcáis, porque su humildad y sentido del humor os hará pasar un muy buen rato.
GRACIAS
0 comentarios